A pesar de que
muchos daban por muerto y casi enterrada la carrera de Pau Gasol tras un par de
irregulares temporadas marcadas por las lesiones en los Ángeles Lakers, el
mayor de los Gasol demostró ayer ante Francia que todavía le queda mucha guerra
que dar.
Una Francia
muy sólida que contaba con la ventaja de jugar ante su público, que llegó conseguir
tener una renta de 12 puntos en el tercer cuarto, a la que tanto Pau y compañía
consiguió ir minando poco a poco, recortando las diferencias con mucha
paciencia, trabajo y una enorme defensa, que conseguía secar los contrataques
franceses.
Las cosas se
ponían bastante cuesta arriba cuando el reloj marcaba los últimos 5 minutos de
partido, pero…apareció la mejor versión de Pau
Gasol. Un Pau pletórico, galáctico, estratosférico, luchador, capaz de
sacar del partido a algunos de los integrantes más peligrosos de la selección
francesa y con una mano prodigiosa, que introducía en la canasta el 90% de los
balones que tocaba. Un Gasol que nos permitió clasificarnos una final, en la
que muy pocos veían, me incluyo, a nuestra selección española.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Ayúdanos a mejorar con tus comentarios