El club con más historia del fútbol español, el Recreativo de Huelva, se encuentra en
estos momentos en una situación muy delicada. Debido al pasotismo mostrado por
los poseedores del paquete mayoritario de las acciones del club, este se
encuentra al borde de la desaparición, al no poder hacer frente desde hace
meses a las nóminas del equipo y los trabajadores.
Una situación de tan extrema gravedad, que cualquiera de los
próximos partidos que dispute el Recreativo, puede ser el último que sus
aficionados puedan ver en el Nuevo Colombino.
¿Cómo se ha llegado hasta aquí?
Según nos han contado hoy los trabajadores del club a través de
un comunicado, todo ha sido causado por la terrible desidia mostrada por los
que tienen el control del equipo, Gildoy (con un 75% de la acciones) y el
Ayuntamiento de Huelva (poseedor del 25% restante).
Tal como ellos nos comentan, Gildoy ha impedido que se pudiera
nombrar a un presidente que ayudara a reconducir la situación y no ha querido
aceptar una oferta firme de un grupo de empresarios onubenses, porque no parecía
poseer “garantías suficientes”
Bloqueados por las constantes negativas de Gildoy, los
trabajadores del Recreativo de Huelva han decidido rebajar el precio de las entradas del
próximo partido a un euro. Una cantidad simbólica, con la que esperan llenar el
estadio, recaudar algo de dinero para poder hacer frente a algunos gastos y
permitir que la afición pueda despedirse del equipo de sus amores, en el caso
de que este sea su último partido.
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