Confieso que antes de que
comenzara el partido, que enfrentó anoche al Bayern contra el Atlético, temía que la predicción que hicimos la
semana pasada se fuera al garete. Lo temía, porque el equipo de Guardiola había
sido capaz de remontar en su estadio, resultados mucho más abultados que el 1-0
conseguido por el Atleti en la ida.
Un Guardiola, que a tenor de
este resultado y el de anteriores ediciones de Champions, no sabe cómo hacer que su equipo sea competitivo contra
los equipos españoles. Es como si al salir el nombre de la bola, sufriera algún
tipo de parálisis mental que le impide pensar con claridad y buscar soluciones
fuera del toque, toque y más toque.
Ojo, no le quiero quitar
mérito al Atleti, que se mantuvo muy bien en su papel de administrar su ventaja
e intentar encontrar el gol que le pusiera las cosas cuesta arriba al Bayern,
pero…gran parte de la culpa de que hoy estén en la final de Milán es del equipo
alemán. Un equipo, que desaprovechó la oportunidad de marcar un penalti
decisivo, en el que se vio poco, por no decir prácticamente a varios de sus jugadores
más importantes y cuya defensa estuvo bastante desacertada.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Ayúdanos a mejorar con tus comentarios